Recuerdo la vez que noté que mi encimera había perdido su elegancia original. Su brillo inicial parecía desvanecido, como si el tiempo la hubiera alcanzado más rápido de lo que esperaba. Me puse a investigar, y descubrí que no estaba solo en esta situación. El cuarzo es un material compuesto, generalmente alrededor del 90% de cuarzo natural incrustado en resina polimérica y pigmentos. Esto le da su famosa resistencia y, naturalmente, su brillo incomparable. Pero, como cualquier superficie, con el uso cotidiano, necesita un poco de mantenimiento.
El presupuesto para mantener tu encimera puede variar. En promedio, usar productos especiales para restaurar el brillo puede costar entre 10 y 50 euros, dependiendo de la marca y la cantidad que necesites. Pero, ¿es realmente necesario gastar tanto? A veces comencé con algo tan simple como agua tibia y un poco de jabón. Sin embargo, cuando la pérdida de brillo es significativa, vale la pena considerar otras técnicas más sofisticadas.
Había leído que fabricantes de cuarzo recomiendan evitar el uso de productos de limpieza abrasivos, que pueden dañar la superficie. En un artículo de noticias, se destacó que el uso inadecuado de ciertos productos resultó en gastos elevadísimos para los propietarios que intentaron restaurar su encimera sin orientación profesional. La clave está en usar limpiadores suaves y paños de microfibra.
También encontré información sobre el proceso de pulido. Aunque muchos optan por llamar a un profesional para pulir sus encimeras, existe la posibilidad de hacerlo uno mismo. La pulidora cuesta alrededor de 50 a 100 euros y el proceso puede tomar una o dos horas, dependiendo del desgaste que presente tu encimera. Se habla de movimientos circulares y no presionar mucho para evitar que el calor dañe la resina.
En el mundo de los materiales compuestos, la resina juega un papel crítico. Funciona como aglutinante, pero también como protector. Sin embargo, tiende a descomponerse con productos químicos de uso común, algo que descubrí cuando sin querer arruiné parte de mi encimera usando un limpiador con amoníaco. Aconsejaría a cualquiera probar cualquier nuevo limpiador en un área pequeña y discreta primero.
Por último, si observas que las técnicas caseras no devuelven el brillo deseado, no dudes en contactar al fabricante de tu cuarzo. Las grandes marcas suelen ofrecer garantías de 10 a 15 años y, en algunos casos, pueden enviar soluciones específicas para resolver problemas comunes. La atención al cliente de una empresa responde a dudas basadas en productos específicos para garantizar que las superficies se mantengan en perfecto estado, reflejando así su verdadero potencial.